Los Suspiros de Canela

No lejos de Wold Newton, en Humberside Inglaterra, hay un enorme y redondo tumulo funerario llamado Willy Howe, quiza fue construido a finales del neolitico. Los colonizadores anglosajones y escandinavos lo reconocen como un cementerio, de alli su nombre “howe”, que significa tumba.
Existen varias creencias relacionadas con este lugar, un nativo de la zona cuenta una sobre un aldeano que se dirigia a su casa, ya tarde, por la noche. Algo borracho escucho cantos y juergas procedentes del tumulo funerario. En un costado hallo una puerta abierta y al mirar hacia dentro vio una casa brillantemente alumbrada, llena de hombres, mujeres y niños sentados ante un banquete.
Al verlo en la puerta, uno de los criados le dio una copa de vino.
El hombre tiro el vino, guardo la copa y escapo, las personas que estabab celebrando lo persiguieron, pero el alcanzo a llegar a su casa antes de ser capturado.
El aldeano no quiso beber el vino por temor a quedar en el poder de los gobernantes del inframundo.
En el norte de Europa se pensaba que los muertos seguian otra forma de vida despues de morir terrenalmente en sus propios tumulos funerarios, tambien se creia que en realidad se trataba de hadas..



Volviendo al tema de la copa robada, en su momento se le obsequio al rey Enrique I, quien a su vez se la dio a su cuñado el rey David de Escocia, años despues Enrique II pidio ver la copa y Guillermo de Escocia la devolvio a Inglaterra, mas no se sabe que paso con ella despues..
La copa de hadas que aun se conserva es conocida como la “Suerte de Edenhall” y en la actualidad se encuentra en el Victoria & Albert Museum en Londres, es una copa de cristal esmaltado y dorado con un diseño poco comun.
Fue una reliquia de la familia Edenhall en Cumbria,la leyenda cuenta que la copa la dejaron caer unas hadas que fueron atrapadas mientras jugaban cerca de St. Cuthbert’s Well. Al verse interrumpidas, las hadas huyeron gritando:
“Si esta copa se rompe o cae, adios a la suerte de Edenhall”. Por lo tanto, “la suerte” fue conservada cuidadosamente y cuando alguien queria verla, colocaban un cojin especial debajo de ella en caso de accidentes.